En este estado de alerta que vive Madrid por la crecida del Manzanares, los drones se han vuelto imprescindibles para controlar esa subida del río. El agua está a 80 centímetros de algunos puntos de la A-6, y también se podría anegar la M-30 y la M-40. El trabajo de vigilancia es vital estos días y en ello está la Unidad de Vigilancia Aérea de Policía Municipal de Madrid.
Comienza un vuelo con dos agentes por cada aeronave. Uno observa las imágenes a vista de pájaro. Otro, a vista de dron, siempre en línea visual con el aparato, porque las zonas a cubrir son complicadas.
Actúan en tres puntos. Presa de El Pardo, Puente de San Fernando y Puente de los Franceses. Cubren unos 800 metros del cauce del río. El aparato cuenta con megafonía. Es vital para dar avisos a los incautos. Esta Unidad colaboró en Valencia tras la DANA de octubre. Pero aquí en Madrid es la primera vez que toman parte activa en unas inundaciones.