El distrito de Vallecas en Madrid está experimentando una rápida transformación inmobiliaria que está afectando significativamente a sus habitantes. Antiguas fábricas de ropa y otros espacios están siendo reconvertidos en alojamientos turísticos, lo que ha provocado un aumento del precio de los alquileres en la zona. Inversores de diferentes nacionalidades están adquiriendo edificios completos para destinarlos al negocio de los pisos turísticos, como es el caso de una empresa catalana que ha comprado ocho edificios en Vallecas.
Uno de los ejemplos más destacados de esta transformación es el caso de un antiguo frutero llamado Jawad, quien ha adquirido un edificio de cinco plantas en Vallecas y lo ha reconvertido en 14 alojamientos turísticos. A pesar de afirmar que ha conseguido una licencia para hostal, en los registros oficiales no aparece ninguna solicitud al respecto. Los inquilinos se quejan de las condiciones de los alojamientos, como la presencia de chinches, duchas compartidas, ruido y suciedad, aunque destacan la ubicación cercana al centro de Madrid y los precios bajos.
La rápida transformación de Vallecas ha provocado la pérdida de miles de viviendas destinadas a uso familiar en la última década, lo que ha elevado el precio de los alquileres en la zona. Esta situación ha generado malestar entre los vecinos, quienes denuncian la presencia creciente de pisos turísticos que afectan negativamente a la convivencia en el barrio. A pesar de las críticas, los inversores continúan adquiriendo propiedades en la zona para destinarlas al mercado turístico, lo que está cambiando el paisaje urbano y social de Vallecas de manera acelerada.