El festival Veranos de la Villa vuelve un año más a amenizar la canícula madrileña a ritmo de Camela, Carla Bruni, Andrés Suárez o Paco Soto, en una 40ª edición con el centro cultural Condeduque como principal escenario, y que arrancará con un espectáculo sinfónico homenaje a Nino Bravo a cargo de la Orquesta y Coro de RTVE y el cantante Serafín Zubiri, en el parque Enrique Tierno Galván.
El alcalde de la capital, José Luis Martínez-Almeida, ha presentado, junto al director artístico, Ángel Murcia, este viernes en el Espacio Cultural Serrería Belga, esta nueva edición que, del 9 de julio al 25 de agosto, ofrecerá una amplia programación a cargo de artistas y creadores nacionales e internacionales con 74 propuestas diferentes.
Martínez-Almeida ha señalado que hace 40 años Madrid era una ciudad «muy diversa», aunque ha mantenido esta «seña de identidad» de la capital durante todos estos años y ha parafraseado a la escritora Emilia Pardo Bazán cuando dijo que Madrid es «audaz, jaranero y curioso».
El alcalde se ha referido a Ángel Murcia, quien dejará después de cinco años la dirección artística del festival, y ha agradecido su labor, especialmente en 2020 cuando consiguió celebrar Veranos de la Villa pese a la pandemia. «Esta última edición satisface todas las apetencias que uno pueda tener en verano, siete distritos y escenarios diversos», ha subrayado.
El acto ha contado con la actuación de Vicente Navarro, nombre destacado de la escena neo-folk, además de B-Boy Grazy y B-Boy Clav, de la compañía de breaking Ntamo Performance.
A lo largo de 48 días y en 17 espacios, se podrá disfrutar de 270 citas que abarcan música, danza, teatro, circo, cine y arte, entre otras propuestas. Más del 77% de ellas serán de acceso gratuito y la presencia del festival se extenderá a ocho distritos de la ciudad.