Mientras los portales inmobiliarios se llenan de pisos turísticos, languidece el crecimiento de la vivienda familiar en la capital. Madrid solo ha sumado 2.272 hogares en la última década, según un informe presentado por Más Madrid. Este estudio revela que las zonas con mayor pérdida de vivienda y población se corresponden con las que sufren una mayor intensidad en el proceso de turistificación, donde se registra un alto número de Viviendas de Uso Turístico (VUT). Más del 77% de las familias madrileñas destinan más del 30% de sus ingresos a pagar la hipoteca o el alquiler, lo que ha llevado al asesor en temas de urbanismo, José Gálvez, a alertar de que Madrid se enfrenta a una «emergencia habitacional».
Los distritos que más han perdido viviendas para uso familiar en la última década son Puente de Vallecas, Latina, Salamanca y Carabanchel. Por otro lado, las zonas que han sumado más viviendas familiares son Hortaleza, Villa de Vallecas y Fuencarral-El Pardo. El informe indica que las VUT han crecido ininterrumpidamente en todas sus modalidades en los últimos catorce años, con un notable aumento de este fenómeno en barrios como Puente de Vallecas y San Diego.
El ayuntamiento informó que unas 243 viviendas VUT en Madrid han vuelto a su uso original en los últimos años, aunque la falta de información oficial dificulta el esclarecimiento sobre el tipo de vivienda turística que se está ofreciendo en la ciudad. Más Madrid se muestra preocupado por el proyecto de la nueva norma de VUT que presentará el gobierno de Almeida en abril, temiendo que se convierta en una amnistía para los 24.000 pisos turísticos ilegales.
El informe revela que el 77% de los madrileños destinan más del 30% de sus ingresos para el pago de la vivienda, una cifra que supera el límite fijado por la ley de vivienda para considerar un distrito como una zona tensionada. Más Madrid y Sumar presentarán una proposición no de ley en el Congreso para reformar la ley de vivienda y permitir que sean los municipios los que soliciten la declaración de zonas tensionadas. A pesar de esto, la vicealcaldesa de Madrid, Inma Sanz, ha rechazado la propuesta y ha afirmado que la política del Ayuntamiento es incrementar la oferta de vivienda a precios asequibles a través de la construcción directa y la colaboración pública privada.