La consejera de Familia, Juventud y Asuntos Sociales de la Comunidad de Madrid, Ana Dávila, ha pedido una «reunión urgente» a la ministra de Igualdad, Ana Redondo, para tratar los casos de presuntos agresores que buscan acceder a recursos para la atención contra la violencia de género después de haber cambiado registralmente de sexo en virtud de la Ley Trans estatal. Tras la misiva enviada por Dávila a Redondo la pasada semana para alertar de esta situación, la consejera madrileña ha enviado una segunda en la que agradece la «rápida respuesta» y «buena disposición» de la ministra, pero advierte de que no resuelve las «cuestiones planteadas» en la primera carta.
Según han informado a Europa Press fuentes de la Consejería, el artículo 46.3 de la Ley Trans a la que alude Ana Redondo «no responde» a las demandas de la Comunidad de Madrid, por lo que le solicitan una «reunión urgente» para abordar estos problemas y posibles soluciones «de forma conjunta». La nueva carta de Dávila subraya que de acuerdo con los técnicos de su Consejería, ese artículo «no da respuesta a las diversas problemáticas que están surgiendo en su aplicación» y «a otras que puedan surgir en el futuro». La consejera advierte a Redondo de que el sistema de protección «está en riesgo» y asegura que es el «deber» de las administraciones «poner todos los medios» a su alcance «para preservarlo».
En su primera carta, Dávila advertía que desde los puntos municipales del Observatorio de Violencia de Género de la Comunidad de Madrid se ha transmitido «preocupación» al comprobar «la petición de ayuda de personas que, habiendo realizado el cambio registral de sexo, siendo ahora femenino», figuran en el sistema VioGén como agresores cuando su sexo era masculino. Por otro lado, desde la Consejería apuntaban a que se han detectado «al menos otros tres casos distintos a los anteriores» en el último año en la Mancomunidad de Sierra Oeste.
Por último, varios varones que han cambiado de sexo registral al femenino están pidiendo información sobre las ayudas a las víctimas de violencia de género en distintas localidades, según la información facilitada desde la Consejería. Tras ello, la ministra Ana Redondo aseguró que estaban «valorando» los casos de agresores que cambian de género y buscan después recursos contra la violencia machista.