El Gobierno español ha aprobado una nueva normativa de seguridad que entrará en vigor a partir del 1 de julio y afectará a 4 de cada 10 ascensores en España, según la Federación Empresarial Española de Ascensores (FEEDA). Esta regulación obligará a los ascensores más antiguos a incorporar medidas de seguridad similares a las de los modernos, con el fin de garantizar la protección de los usuarios.
Entre los requisitos que incluye la normativa se encuentra la nivelación de los elevadores, la detección en puertas con cortinillas, la instalación de sistemas de comunicación bidireccional y la protección contra movimientos ascendentes incontrolados de la cabina. Estas mejoras representarán un costo para las comunidades de vecinos de entre 800 y 30.000 euros, dependiendo de la complejidad de la adaptación necesaria.
Según Javier de Pedro, responsable de Marketing de la empresa de ascensores Duplex, aquellos ascensores que deban pasar una revisión a partir del 1 de julio deberán cumplir con los nuevos requisitos de seguridad establecidos en la normativa. En caso de no cumplir con alguna de estas condiciones, será necesario realizar las modificaciones correspondientes en el plazo indicado.
Se estima que alrededor de 400.000 ascensores en servicio en España tienen más de 30 años de funcionamiento y serán los más afectados por esta nueva normativa. Con estas medidas, se busca garantizar la seguridad de los usuarios y evitar posibles accidentes en los ascensores más antiguos del país.