El exasesor ministerial Koldo García ha declarado durante dos horas y media ante el instructor en el Tribunal Supremo en relación al caso que lleva su nombre. Según fuentes consultadas, García ha negado recibir comisiones por adjudicaciones ilegales, asegurando que no tiene constancia de repartos de dinero de mordidas ni al ministro Ábalos ni al PSOE.
El exasesor ha admitido tener una relación cercana con el presunto conseguidor de la trama, el empresario Víctor de Aldama, con quien coincidía a menudo dentro y fuera del Ministerio de Transportes. De Aldama, según García, iba a la sede ministerial por gestiones relacionadas con Air Europa, con la que trabajaba.
Respecto a las acusaciones de presunta adjudicación ilegal a Soluciones de Gestión de contratos para material sanitario en plena pandemia, García ha aseverado que en esa época hubo muchas ofertas de otras empresas y ha desviado la responsabilidad de estas supuestas ilegalidades hacia el subsecretario de Transportes en ese momento, Jesús Manuel Gómez.
En cuanto a los presuntos amaños para la adjudicación de obra pública, en los que De Aldama declaró haber repartido hasta 4 millones de euros entre él, García, Ábalos y el PSOE, este último lo ha negado rotundamente. También se ha desmarcado del manuscrito presentado por De Aldama como prueba de las supuestas adjudicaciones pactadas.
El magistrado del Tribunal Supremo ha mantenido las medidas cautelares sobre García, que incluyen la prohibición de salir del país, la retirada del pasaporte y la obligación de comparecer quincenalmente en sede judicial en Benidorm. Estas medidas fueron acordadas en febrero por el juez de la Audiencia Nacional que inició la investigación del caso.