Una urbanización ubicada en el PAU de Carabanchel se ha convertido en escenario de una macrookupación, donde han sido usurpados varios pisos antes de las fiestas navideñas.
Según informes, los ocupantes son familias peruanas que habrían «alquilado» los pisos a un supuesto clan a cambio de poco más de 2.000 euros, mientras se encontraban en la cola de un comedor benéfico del barrio.
La mayoría de los vecinos afectados prefieren no hablar, aparentemente por temor a represalias. Sin embargo, una residente ha hablado con Telemadrid para expresar que vive en la urbanización desde septiembre y que notaron la presencia de nuevos ocupantes en el puente de la Constitución.
A pesar de que la promotora demostró interés en resolver la situación en un principio, en las últimas semanas los vecinos han reportado peleas y falta de respuesta a sus reclamos. Algunos residentes se quejan de las molestias y ruidos causados por los ocupantes, llegando a plantearse cambiar de vivienda si la situación se vuelve insostenible.