El Gobierno de Benjamin Netanyahu ha condenado la decisión del Gobierno español de cancelar el contrato con una empresa israelí para la adquisición de balas para la Guardia Civil, tras la crisis que había generado en la coalición, y ha afeado que con ello lo que está haciendo es dejar de lado la seguridad «por fines políticos».
«Israel condena firmemente la decisión del Gobierno español de romper unilateralmente un contrato firmado con la empresa de defensa IMI Systems y su anuncio de que se abstendrá de futuros acuerdos de defensa con empresas israelíes», ha trasladado a Europa Press un portavoz del Ministerio de Exteriores israelí.
A juicio del Ejecutivo israelí, «el Gobierno español está sacrificando consideraciones de seguridad por fines políticos y sigue situándose del lado equivocado de la historia contra el Estado judío que está defendiéndose de ataques terroristas en siete frentes», ha lamentado el citado portavoz.
El Gobierno israelí responde así a la marcha atrás dada por el Ejecutivo el jueves después de que la crisis que se abrió la víspera en la coalición, con IU amenazando incluso con su salida, tras informar el Ministerio del Interior de que iba a seguir adelante con la compra de 15 millones de balas por valor de 6,6 millones de euros.
Finalmente, tras los contactos mantenidos entre el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el titular de Interior, Fernando Grande-Marlaska, por un lado, y la vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz, en representación de Sumar, el Ejecutivo ha anunciado que había decidido «rescindir de forma unilateral el contrato de compra de munición a la empresa israelí IMI Systems».
EL GOBIERNO RESPONDE CON CRÍTICAS A LAS OPERACIONES EN GAZA
Por su parte, el ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, ha cargado este viernes contra el Gobierno israelí por los «miles» de civiles muertos en sus operaciones militares en Gaza y Cisjordania y reclamando un alto el fuego, en la primera reacción después de que Israel condenara la anulación de un contrato con una empresa israelí para comprar balas.
«Las operaciones militares de Israel siguen provocando muerte en Gaza y Cisjordania. Miles de civiles, mujeres, niños, trabajadores humanitarios», ha escrito Albares en un mensaje en la red social X, en el que sin embargo no ha hecho ninguna mención a las críticas llegadas la víspera desde Israel por la decisión del Gobierno de coalición.
«La entrada de ayuda humanitaria tiene que ser inmediata. Exijo el acceso a alimentos y medicamentos», ha añadido el ministro, que ha venido publicando mensajes similares durante los últimos meses en relación con las operaciones militares lanzadas por Israel a raíz del ataque terrorista perpetrado por Hamás el 7 de octubre de 2023.
Albares ha defendido que «por la más elemental humanidad, hay que poner fin a la guerra y lograr la solución de dos estados». «No nos resignamos a la violencia», ha asegurado el titular de Exteriores, para quien «la paz es posible».
Así las cosas, ha sostenido que «el alto el fuego permanente y la liberación de los rehenes no pueden demorarse», en referencia al medio centenar de israelíes que aún siguen en manos de Hamás y otros grupos armados palestinos en Gaza tras ser secuestrados durante el ataque de 2023.
NUEVO ENCONTRONAZO CON ISRAEL
Este nuevo choque con el Gobierno de Benjamin Netanyahu se produce casi un año después de la llamada a consultas de la entonces embajadora en Madrid, Rodica Radian Gordon, por el reconocimiento del Estado palestino.
El Gobierno israelí no solo retiró a su embajadora, sino que empleó palabras muy duras contra la decisión del Ejecutivo de Pedro Sánchez, que se hizo efectiva el 28 de mayo y que secundaron otros países como Irlanda y Noruega. Así, su entonces ministro de Exteriores y ahora titular de Defensa, Israel Katz, sostuvo que España había decidido «conceder una medalla de oro a los asesinos de Hamás».
Desde entonces, Israel está representada a nivel de encargado de negocios, ya que Netanyahu aún no ha dado la orden de enviar un nuevo embajador. En este tiempo, Radian Gordon cumplió su mandato, ya que se jubiló en julio pasado, pero había de antemano nombrado un sucesor para el puesto, que sin embargo nunca llegó a ocuparlo.
Así, Zvi Vapni optó por marcharse a la Embajada israelí en Países Bajos, tal y como confirmó entonces el Ministerio de Exteriores israelí a Europa Press, y desde entonces no se ha hecho oficial el nombre de su eventual sucesor.
Con todo, el reconocimiento de Palestina por parte del Gobierno no fue el primer desencuentro con el Ejecutivo israelí desde el ataque de Hamás y la consiguiente ofensiva militar de Israel sobre la Franja de Gaza.
A finales de noviembre de 2023, la embajadora israelí también fue llamada a consultas a raíz de que Sánchez cuestionara en unas declaraciones que el Ejército israelí estuviera actuando conforme al Derecho Internacional en Gaza. La embajadora no regresó a su puesto hasta principios de enero.