El Santiago Bernabéu volvió a ver ganar a su equipo después de tres partidos consecutivos sin hacerlo. El vigente campeón liguero necesitaba darse una alegría y animarse tras el intento fallido de remontada en Champions, pero no fue el partido más cómodo. La primera parte, para olvidar, con muy poca tensión y muy espesos ofensivamente, aunque apenas sufrieron en defensa ante un Athletic inofensivo en ataque.
En la segunda mitad, cambió algo el tono y las ocasiones blancas se sucedieron, con un total de 17 remates, pero Unai Simón y una sólida defensa rojiblanca impedían el alivio local. De hecho, el gol no llegó hasta el descuento, cuando Valverde se sacó un disparo tan preciso como potente con el exterior de su bota derecha, directo a la escuadra e imposible para el portero internacional español.
1-0 y tres puntos para mantener el pulso con el FC Barcelona por el título de LaLiga, aunque los azulgranas siguen cuatro puntos por encima de los madridistas. Mientras, el Athletic, que llega con la euforia de alcanzar las ‘semis’ de la Liga Europa, sigue cuarto con cinco puntos de colchón sobre el Villarreal, y alarga su mala racha en el feudo madridista: 20 años sin ganar.
La noche en el Bernabéu no era fácil para el equipo blanco, que hace apenas cuatro días consumó, también su feudo, su eliminación de la Champions, a manos del Arsenal. Y ante el Athletic el ritmo y la tensión inicial esperada no fue tal, con un duelo que parecía vivir en un letargo durante los primeros minutos.
El Madrid dominó el balón sin demasiados problemas, pero la claridad en ataque volvió a brillar por su ausencia. Solo Vinícius parecía querer hacer daño intentándolo una y otra vez a Andoni Gorosabel por la izquierda. De hecho, estuvo cerca de marcar en un disparo lejano del ‘7’ brasileño tras una gran recuperación en campo rival. Mientras, el Athletic solo se preocupaba de protegerse, ofreciendo muy poco con balón.
Solo un remate a puerta -fue del Madrid- es el dato que mejor representa una primera parte de nivel de pretemporada. Tras el descanso, esa desidia pareció desaparecer, con un Real Madrid más volcado y que en el primer minuto de la segunda parte gozó de la ocasión más clara, con Rodrygo Goes como protagonista y mandando su remate cerca del poste. Después, Eduardo Camavinga pudo abrir el marcador tras una carrera desde su propio campo y un pase sensacional de ‘Vini’, pero se encontró con Unai Simón.