Los casos de tosferina en la Comunidad de Madrid siguen registrando una tendencia ascendente y se han multiplicado por 66 en el último año.
En concreto, en las doce primeras semanas del año se han notificado a través de la Red de Vigilancia del Sistema de Enfermedades de Declaración Obligatoria (EDO) un total de 528 casos, frente a los ocho que fueron registrados en las mismas semanas de 2023. Del total de lo que llevamos de año, 25 han requerido ingreso hospitalario, lo que supone el 4,7%. Entre estos últimos, 16 eran menores de un año, según el último ‘Informe Epidemiológico Semanal’ publicado por la Consejería de Sanidad.
La tosferina es una infección bacteriana aguda causada por el bacilo ‘Bordetella Pertussis’ que, hasta la introducción de los programas de vacunación en 1965, era una de las enfermedades más comunes de la infancia y una de las causas más importantes de mortalidad en niños. Desde la Consejería de Sanidad han recordado que la epidemiología de la tosferina se presenta históricamente en ondas polianuales aproximadamente cada cinco años, siendo la última onda epidémica la que se produjo en 2015.
De este modo, desde el departamento que dirige Fátima Matute han explicado que actualmente, al igual que ocurre en España y en el resto de Europa, se está en el inicio de una onda epidémica de tosferina y, aunque no es posible estimar en estos momentos su evolución con precisión, los datos apuntan a un comportamiento epidémico «dentro de lo esperado». La edad media de los casos contabilizados en la región en lo que va de año es de 14,1 años, aunque el grupo de edad de 5 a 14 años concentra la mayoría de los casos, el 65,5% de ellos corresponden al grupo de edad de 5-14 años. En cuanto a los menores de un años, suponen el 7,6% de los casos.
Entre los casos detectados en menores de 15 años, más del 95% están correctamente vacunados, presentan sintomatología leve y ninguno de los casos infantiles ha presentado complicaciones relevantes, han indicado desde el departamento que dirige Fátima Matute. La presentación clínica de la tosferina depende de la edad y de los antecedentes de vacunación. En adolescentes y adultos, la enfermedad puede ser leve, mientras que, en los menores de 6 meses, sobre todo en los menores de 3 que aún no han recibido dos dosis de primovacunación, la tosferina presenta riesgo de complicaciones y mortalidad.
En la Comunidad, por grupos de edad, el 95,3% de los casos entre 5-9 años y el 96,9% de los casos entre 10-14 años estaban correctamente vacunados. En los menores de un año, si solo se tienen en cuenta los casos a partir de los 2 meses de edad, que es cuando está indicada la primera dosis de la vacuna frente a la tosferina, el 93% estaban vacunados. El actual calendario vacunal recomienda 4 dosis de vacuna frente a la tosferina: primovacunación a los 2 y 4 meses de vida y dos dosis de recuerdo a los 11 meses y a los 6 años.
En 2016, se introdujo la vacunación de las embarazadas a partir de la semana 27 con la vacuna triple bacteriana acelular (dTpa). En líneas generales, según los datos facilitados por la Consejería a Europa Press, las coberturas de vacunación sistemática frente a la tosferina tanto en mujeres embarazadas (cobertura 90%) como en lactantes (97%) y en los recuerdos de los 6 años (94%) y 14 años (84%), se sitúan en un nivel óptimo. «Las coberturas vacunales están siendo las óptimas o se está observando que los contagiados estaban sin vacunar», han explicado desde este departamento.
Durante el periodo pandémico 2020-2022, la incidencia de tosferina se redujo drásticamente, pero, a partir del verano del 2023, la enfermedad ha experimentado un rápido crecimiento, marcando el inicio de una nueva onda epidémica. Este marcado aumento de casos en la segunda mitad del año difiere del patrón estacional clásico de la tosferina, que presentaba un acúmulo de casos en primavera y verano. El Instituto de Salud Carlos III ha notificado 4.000 casos de tosferina entre enero y febrero, cerca del doble de lo que se registró en todo 2023 (2.560 casos), según se recoge en un informe de la Red Nacional de Vigilancia Epidemiológica (RENAVE).
La mayoría de los casos de 2023 han ocurrido en edad pediátrica (71,5% en menores de 15 años). Destaca el grupo de 10 a 14 años, que es el que más casos acumula, con el 36,3 por ciento del total de casos. La incidencia de tosferina es siempre máxima en los menores de un año, seguida del resto de grupos en edad pediátrica (1-14 años). El 5,6% de los casos declarados de tosferina se hospitalizaron. Los menores de un año registraron el mayor porcentaje, con el 33,3% de casos hospitalizados, seguido de los adultos mayores de 50 años, con el 14,7%.
Este mismo informe alerta de la muerte de un lactante durante 2023 por tosferina en el primer mes de vida, sin condiciones de riesgo, cuya madre no se había vacunado durante la gestación. «Es importante que los niños se vacunen, siempre que se pueda, a la edad indicada en calendario, y que aquellos que han perdido alguna dosis sean identificados y recaptados para recibir las dosis tan pronto como sea posible», se recoge en el documento.