Mala racha para el Real Madrid y para el Ayuntamiento de la capital. Hace dos semanas se suspendieron los conciertos en el Santiago Bernabéu, al menos hasta julio, y este jueves se hizo público el fallo de la jueza María del Carmen Casado en el que obliga a parar las obras de construcción de dos aparcamientos y un túnel para el club blanco, en el paseo de la Castellana-Santiago Bernabéu-Padre Damián. Los trabajos se estaban haciendo con el visto bueno del Gobierno municipal, pero sin autorización administrativa, porque la jueza la retiró en una sentencia el 23 de mayo.
El nuevo fallo llega tras la apelación de los vecinos que exigían que tanto el Ayuntamiento como el Real Madrid cumplieran con la decisión judicial anterior. Almeida se ha comprometido este viernes a acatar la sentencia y también ha dicho que trasladará al Real Madrid que deberá “reponer la superficie [afectada por las obras] a su estado anterior”, algo que parece extraño, ya que el Consistorio ha reconocido que todavía está estudiando si debe presentar un recurso de apelación, para lo que dispone de 15 días desde que le notificaron el fallo el pasado miércoles.
La oposición ha celebrado la victoria de los vecinos, que fueron los que interpusieron la querella contra las obras y a los que la justicia dio la razón en mayo pasado al determinar que no había “interés público” detrás del proyecto y que además generaría “daño medioambiental”, ya que implicó la tala de varios árboles. “Queremos felicitar a las asociaciones de vecinos y vecinas”, ha dicho en una rueda de prensa Eduardo Rubio, portavoz de Más Madrid. Rita Maestre, la líder de la oposición en el Consistorio, ha acusado al Gobierno municipal a través de su cuenta de X de “marear la perdiz” al no acatar la primera sentencia. “Exijo al alcalde que acate el auto”, ha añadido.
El portavoz socialista Antonio Giraldo también ha acusado al equipo de Gobierno municipal de haber concedido suelo público “a una empresa privada”, al Real Madrid, “de manera irregular”. También se ha cuestionado quién va a “pagar el pato” de tener las obras paralizadas hasta que el recurso se resuelva. El auto del miércoles dicta que tanto el Consistorio como el Real Madrid están “asumiendo el riesgo” de “los costes de ejecución” de las obras en el caso de que la justicia de la razón a los vecinos de manera definitiva. El auto también señala que en ese caso, de terminarse las obras, la situación podría ser de “difícil o imposible reversión”.
El Real Madrid Estadio S.L. ganó en julio de 2023 un concurso público para construir dos grandes aparcamientos en el Paseo de la Castellana, junto al Santiago Bernabéu. Pese a que el contrato era muy jugoso ―explotar durante 40 años un negocio de 561 millones de euros en plena arteria de Madrid―, no hubo competencia para realizar unas obras que fueron iniciativa del propio club.
El proyecto contempla dos aparcamientos públicos de cuatro plantas cada uno y cuya superficie total es de más de 70.000 metros cuadrados. Una se proyecta bajo el Paseo de la Castellana y tendrá 1.229 plazas de aparcamiento. El otro, bajo la calle Padre Damián, con 617 huecos. De salir adelante el proyecto, la segunda planta de este parking albergará 12 dársenas con aparcamientos para autobuses y un túnel para conectar Padre Damián con el Paseo de La Habana.